Hace pocos días el estado colocaba con descuento entre inversores institucionales un 7 % de Bankia incrementando las acciones de la compañía que cotizan libremente en el mercado (bueno a medio plazo), pero penalizando al valor a corto plazo al vender con descuento (lógico) el paquete de acciones colocado. A favor de la acción la sobredemanda y que el descuento no fue excesivo, en contra que el estado conserva todavía un 60 % del capital que antes o después tendrá que colocar en bolsa.
Desde el punto de vista técnico la venta provocaba la confirmación de una figura candlestick conocida como estrella del atardecer o vespertina, una señal de venta a corto plazo que dejaba una pequeña zona de techo en la cotización de Bankia, un valor que lleva 9 meses atrapado en un rango lateral entre 4,7 y 3,80 euros, cotizando en los últimos días más cerca del límite inferior y soporte. He dibujado también el gráfico lo que podría ser una linea clavicular de una figura de hombro cabeza hombro que se confirmaría si Bankia cede por debajo de 3,95 - 4 euros, de ocurrir podríamos ver a Bankia testear la base del rango lateral. Cualquier mejoría técnica a corto plazo pasa por superar los 4,22 euros.
El segundo de los gráficos resulta bastante instructivo para aquellos inversores que creen que pase lo que pase y hagamos lo que hagamos en la bolsa siempre se gana a largo plazo. Bankia (en gráficos ajustados por dividendos y ampliaciones) llegó a cotizar a 1400 euros, así que pensar que los inversores que invirtieron en el año 2011 en Bankia puedan recuperar su dinero es más que utópico. Estoy convencido de que se puede ganar en bolsa a largo plazo, pero la diversificación, elección de valores y el momento de invertir (timing) es muy importante, de ello dependerá en gran medida la rentabilidad que obtengamos en el futuro por nuestro dinero.
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